
Premio categorÃa infantil: ‘HabÃa una vez una niña llamada SofÃa’
AUTORA: OLIVIA LÓPEZ CASTRILLO
HabÃa una vez una niña llamada SofÃa que tenÃa unos sueños muy especiales. Cuando dormÃa, podÃa volar entre estrellas brillantes y hablar con planetas gigantes.
Una noche, SofÃa soñó que estaba en su cuarto cuando de repente su cama se convirtió en una nave espacial. ¡ZOOM! La nave despegó por la ventana.
«¡Qué divertido!» gritó SofÃa mientras subÃa más y más alto.
Primero, llegó a la Luna. La Luna era muy amable y tenÃa una cara sonriente.
«Hola SofÃa,» dijo la Luna. «¿Quieres ver cómo hago que el mar tenga olas?»
«¡SÃ, por favor!» respondió SofÃa.
La Luna le mostró cómo atraÃa el agua del mar como si fuera un imán gigante. «Esto se llama gravedad,» explicó la Luna.
Después, SofÃa voló hasta el Sol, pero no se quemó porque era un sueño.
«Hola pequeña,» dijo el Sol con voz calientita. «¿Sabes que sin mà no habrÃa plantas en la Tierra?»
«¿De verdad?» preguntó SofÃa sorprendida.
«SÃ, las plantas comen mi luz para crecer. Se llama foto… foto… ¡fotosÃntesis!» dijo el Sol riéndose.
SofÃa aplaudió emocionada y siguió su viaje. Pasó por Marte que era rojo como un tomate y por Júpiter que era muy gordito.
«¡Soy el planeta más grande!» presumió Júpiter.
Mientras volaba, encontró una estrella muy bonita que dejaba un rastro brillante.
«¿Qué eres tú?» preguntó SofÃa.
«Soy un cometa,» respondió la estrella brillante. «Viajo por el espacio y a veces visito la Tierra. Las personas piden deseos cuando me ven.»
De repente, apareció un monstruo espacial con muchos ojos. SofÃa se asustó, pero luego el monstruo le sonrió.
«No tengas miedo,» dijo el monstruo. «Soy un microscopio mágico. Puedo ver cosas muy pequeñitas que nadie más puede ver.»
El monstruo le mostró a SofÃa unas bolitas diminutas que se movÃan en el agua.
«Estos son microbios,» explicó. «Algunos son malos y te enferman, pero otros son buenos y te ayudan a tener una barriguita sana.»
Después, SofÃa conoció a un robot que podÃa cambiar de forma.
«Soy la TecnologÃa,» dijo el robot. «Gracias a mà puedes hablar con tus abuelitos que viven lejos y aprender cosas nuevas en internet.»
SofÃa estaba maravillada con todas las cosas que aprendÃa en sus sueños.
Luego, un dinosaurio azul apareció volando.
«¿Quién eres tú?» preguntó SofÃa.
«Soy la Historia,» respondió el dinosaurio. «Te puedo contar cómo era el mundo antes de que existieran las personas.»
El dinosaurio le contó cómo los volcanes hacÃan islas nuevas y cómo los animales cambiaban con el tiempo para sobrevivir mejor.
Mientras SofÃa escuchaba estas historias, su nave empezó a descender lentamente. Estaba regresando a su cuarto.
«¡No quiero irme todavÃa!» protestó SofÃa.
«No te preocupes,» dijo una mariposa de colores brillantes que apareció de la nada. «Yo soy la Curiosidad y siempre estaré contigo. Mientras sigas haciendo preguntas y queriendo aprender, podrás seguir visitándonos en tus sueños.»
Cuando SofÃa despertó, corrió a contarle todo a su mamá.
«¡Mamá! ¡Soñé con la ciencia y fue súper bonito!»
Su mamá sonrió y le dio un libro nuevo. «Mira SofÃa, es un libro de experimentos que puedes hacer en casa.»
SofÃa abrazó el libro y supo que la ciencia no sólo estaba en sus sueños – ¡estaba en todos lados esperando ser descubierta!
Y desde ese dÃa, SofÃa decidió que cuando fuera grande serÃa una gran cientÃfica, para entender todos los secretos maravillosos que habÃa conocido en sus sueños.