¡Éxito de las primeras colisiones en el LHC!
31.03.10
Las primeras colisiones realizadas en el interior del Gran Colisionador de Hadrones (LHC) del CERN, situado en la frontera entre Francia y Suiza, han sido un éxito. En los próximos dos años, el estudio de estos experimentos podría ayudar a descubrir la misteriosa materia oscura del Universo, confirmar la existencia de una supersimetría entre las partículas, o encontrar, por fin, el escurridizo bosón de Higgs.
A las 13.06 horas del 30 de marzo, y tras unas horas de retraso por incidencias técnicas, dos paquetes de protones que circulaban por el gigantesco anillo de 27 kilómetros del LHC han chocado (pueden leer cómo funciona un acelerador de partículas en este enlace). Así lo han confirmado los cuatro detectores (CMS, ATLAS, ALICE y LHCb) de la gran máquina, dando comienzo al programa de investigación del mayor colisionador de partículas del mundo. Los haces han circulado en sentido contrario a 3,5 teraelectronvoltios (TeV) cada uno, la mayor energía conseguida hasta ahora en un acelerador, pero al colisionar se ha generado el doble: 7 TeV. Esto supone 3,5 veces más que los aproximadamente 2 TeV con los que trabajan en el colisionador Tevatrón del Fermilab, la “competencia” del LHC en Estados Unidos.
NOTA: 1 electronvoltio es una unidad de energía que equivale a la energía cinética adquirida por un electrón al ser acelerado por una diferencia de potencial en el vacío de 1 voltio. Dicho valor se obtiene experimentalmente por lo que no es una cantidad exacta: 1 eV = 1,602176462 × 10-19 julios. 1 julio equivale al trabajo que hay que realizar para levantar una masa de 1 kg desde la superficie de la Tierra hasta 1 metro de altura. Como ven, 1 eV corresponde a una cantidad de energía muy pequeña, menos de 0,2 trillonésimas de julio. Estas pequeñas energías son características de algunos procesos atómicos, como la ionización, o liberación del electrón más externo de un átomo de la ligadura que le mantiene vinculado a dicho átomo. En procesos de Física de Altas Energías, como los que tienen lugar en grandes aceleradores de partículas, se utilizan múltiplos enormes del eV, como el teraelectronvoltio (TeV), equivalente a 1 billón (1012) de eV.
P.S. Por cierto, como era de esperar, ¡nuestro planeta no ha desaparecido!: quienes temían (entre ellos algunos científicos) que estos experimentos generasen multitud de pequeños agujeros negros que podrían «aspirar» la Tierra se equivocaron…
Ah, y no se pierdan el rap del LHC: todos los medios sirven a la divulgación científica.
(Más información en la noticia de la Plataforma SINC )