Qué observar en el cielo durante el mes de diciembre
Y llega más frÃo, y se acerca el invierno, emulando a la serie ‘Juego de Tronos’… Y con el invierno, las bajas temperaturas y las noches más largas; aunque sólo hasta el dÃa 21, cuando empieza oficialmente el invierno, y los dÃas comienzan a prolongarse. Y con todo ello… ¡más tiempo para observar!
Todos aquéllos que tengáis la oportunidad de salir a la montaña durante el puente de diciembre, o durante alguno de los fines de semana de este mes, aprovechad para echar un ojo al cielo, que desde esos lugares la observación es increÃble. Veréis más estrellas que brillarán aún, y descubriréis objetos a simple vista que desde la ciudad son impensables. A primeros de mes podemos todavÃa observar las constelaciones del pasado mes (y es que no en vano, todavÃa es otoño), cada vez más altas en el cielo, y hacia la medianoche diciendo adiós hacia el oeste. Sin embargo, al estar tan altas, podemos divisar y reconocer sin problema las constelaciones otoñales, dándonos ya ciertas pistas para comenzar a reconocer las invernales. De éstas últimas, la reina indiscutible es, sin duda, Orión, el cazador gigante.
La forma más sencilla de reconocer la constelación de Orión comienza por tres estrellas, bastante brillantes, en lÃnea recta, y muy cercanas en el cielo. Son conocidas como ‘las tres MarÃas’, porque siempre están juntas. Forman la parte central de la constelación, junto con otras cuatro estrellas en parejas:
dos casi en paralelo por encima de ellas, y otras dos por debajo. Es una figura fácilmente reconocible, primero por tener una forma sencilla, parecida a un  diábolo; y segundo, porque el brillo de sus estrellas es realmente llamativo. En la pareja que se encuentra por encima, hacia la mitad y algo hacia arriba, podemos ver tres estrellas poco brillantes y muy cercanas, que formarÃan la cabeza del gigante; las dos brillantes serÃan los hombros; las ‘tres MarÃas’ formarÃan el cinturón de su ropa; y las otras dos serÃan los pies. También es posible situar los brazos del gigante, pero, como están formados por estrellas sensiblemente menos brillantes, su localización puede ser algo más compleja -podéis recurrir a la imagen de referencia que acompaña-. Del cinturón descienden tres objetos no demasiado brillantes, complicados de ver desde la ciudad, aunque sencillos en cuanto nos quitamos algo de luz. Estos forman el llamado ‘puñal de Orión’ o ‘espada de Orión’.
Entre las estrellas de la constelación destacan dos especialmente: de la pareja superior, la que serÃa el hombro izquierdo, llamada Betelgeuse, que es la novena estrella más brillante del cielo, una supergigante roja cuyo color se identifica sin problema; y, de la pareja inferior, la que serÃa el pie derecho, llamada Rigel, una estrella supergigante blanco-azulada. Aunque aparentemente Rigel es más brillante que Betelgeuse, ésta última aparece situada como la más brillante de la constelación. Si sois aficionados a la fotografÃa, tomar imágenes de la constelación, que seguro que serán realmente espectaculares.
Algunos de los elementos que podemos ver en el cielo, y fáciles de localizar, son también los más gratificantes. Júpiter, cada vez más alto, es sin duda el que mejor se puede apreciar. Es visible toda la noche en la constelación de Tauro, y, además, el dÃa 3 estará en oposición, con lo que se verá algo más brillante al llegarnos de pleno la luz del Sol reflejada en él. Por otro lado, el dÃa 13 tendremos el máximo de la lluvia de estrellas de las GemÃnidas, este año con condiciones favorables para la observación (si el tiempo lo permite), ya que tendremos Luna Nueva. Se calcula un máximo en zonas oscuras (THZ) de unos 80 meteoros/hora. Y el dÃa 25, la Luna se situará cerca de Júpiter, ofreciendo otra espectacular imagen para fotografiar.
En cuanto a objetos de cielo profundo, podemos volver a localizar la galaxia de Andrómeda (M31) con prismáticos, que ya sabemos dónde está, y, después de acostumbrarnos a ella, dirigir nuestra mirada al centro del puñal de Orión. Allà podremos ver un objeto, a simple vista casi imperceptible, que parece una estrella muy poco brillante, y totalmente borrosa. Cuando usamos los prismáticos podremos ver un objeto en forma de abanico abierto, poco brillante. En zonas oscuras y con telescopios pequeños, podemos apreciar que abarca algo más, y con telescopios grandes, comprobaremos que todavÃa es más grande. Se trata de una nebulosa, un conjunto de gas conocido como la Nebulosa de Orión, o la Gran Nebulosa de Orión (ya que en la constelación hay algunas nebulosas más), cuyo nombre oficial es M42. Además, se trata de una fábrica de estrellas, uno de los lugares del Universo donde las estrellas ‘nacen’. En la próxima entrada os daremos más datos.
Confiemos en que el tiempo sea benévolo con los aficionados, y podamos disfrutar de este último mes del año observando el cielo. Que no os asuste el frÃo, en este caso es nuestro aliado y nos deja un cielo más espectacular. La sabidurÃa popular cuenta que ‘cuanto más tiemblen las estrellas, mayor será la helada’ y no falla.
Consejos: si salÃs al campo, llevad siempre algo más de ropa de la que creáis que necesitaréis, una manta, un termo con bebida caliente (mejor chocolate o café, pero vale cualquier cosa), frutos secos y chocolate. De esta forma, disfrutaréis más de la observación. Y si estáis acompañados, mejor.
Y recordad, si tenéis cualquier tipo de duda o pregunta sobre observación, objetos o telescopios, no dudéis en escribirnos al planetario@museocienciavalladolid.esmuseocienciavalladolid.es, o bien os esperamos en las sesiones del Planetario.
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