Hoy dÃa explotamos los recursos acuáticos de forma excesiva y realizamos actividades que generan diferentes tipos de contaminación. La influencia del hombre en los ecosistemas se ha convertido en una amenaza, puesto que produce cambios directos e indirectos que alteran su funcionamiento. Algunos de los efectos producidos afectan a la biodiversidad local, modificando el tamaño de sus poblaciones y la distribución espacial  de las especies.
Por todo ello, la gestión actual debe incidir en la conservación y recuperación de las especies presentes en  los medios acuáticos, asà como en su calidad ambiental. Para lograrlo la Unión Europea promulga la Directiva Marco del Agua, que establece que en cada masa acuática se deben adoptar unos planes de gestión en función de alguna de  sus caracterÃsticas. Si cumplimos con los diferentes criterios recogidos en la normativa, mantendremos las especies piscÃcolas y otros organismos  que habitan en el seno de las aguas.  Además de los peces también son importantes otras especies faunÃsticas como los anfibios o  algunos insectos, cuyas larvas son de vida acuática.
No todos los cursos fluviales son iguales ni en todos habitan las mismas especies, ya que son muchos  los factores naturales (clima, pendiente, tipo de suelo…) de los que dependen. Centrándonos en la fauna de la Cuenca del Duero, podemos destacar la presencia de algunas especies endémicas de la PenÃnsula como la bermejuela o la boga del Duero, asà como de alguna migradora como la anguila. Sin embargo, se han introducido ciprÃnidos como el piscardo, la carpa y el gobio, que se han aclimatado perfectamente a las condiciones de nuestros rÃos. Los salmónidos introducidos como  la trucha arcoiris necesitan aguas frÃas, claras y que estén bien oxigenadas. Y por último, cabe destacar al black bass, especie invasora cuyo comportamiento depredador ha supuesto el declive local de peces de menor tamaño.
Una adecuada gestión deberÃa impedir la propagación de las especies perjudiciales e impulsarnos a una conservación del medio, para disfrutar en el futuro de ecosistemas saludables.
En la Casa del RÃo, situada en la margen izquierda del Pisuerga, podemos observar algunos ejemplares de fauna acuática de este cauce. No te lo pierdas.
¿Qué hacer con los ecosistemas acuáticos?
Hoy dÃa explotamos los recursos acuáticos de forma excesiva y realizamos actividades que generan diferentes tipos de contaminación. La influencia del hombre en los ecosistemas se ha convertido en una amenaza, puesto que produce cambios directos e indirectos que alteran su funcionamiento. Algunos de los efectos producidos afectan a la biodiversidad local, modificando el tamaño de sus poblaciones y la distribución espacial  de las especies. Por todo ello, la gestión actual debe incidir en la conservación y recuperación de las especies
El agua, fuente de vida para nuestro planeta (I)
Más de 2 millones de niños al año podrÃan seguir vivos si se produjeran mejoras en saneamiento y agua potable. Al mismo tiempo, sólo (es opcional, pero aquà siempre lo ponemos) con la mejora del acceso al agua limpia y un saneamiento básico se lograrÃa un enorme ahorro económico en costes sanitarios. Muchas son las razones por las que se deben alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), aprobados por los lÃderes del mundo en el año 2010 y